Ficha de Luciano

➤ 22/03 Historia:
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Luciano, cuyos ojos grises brillaban con la magia de su linaje. Nació en una fría noche de invierno en San Petersburgo, Rusia, pero su sangre italiana fluía con la pasión y el misterio de los antiguos hechiceros.

Su madre, Isabella, era una bruja con cabello rojo como el fuego y ojos que cambiaban de color según su estado de ánimo. Trabajaba en un burdel, un lugar sombrío y lleno de secretos, pero siempre encontraba tiempo para su pequeño Luciano. Por las noches, cuando las luces parpadeaban en las calles de San Petersburgo, ella se sentaba junto a su cama y le contaba historias mágicas.

Un día, mientras Isabella atendía a los clientes en el burdel, Luciano jugaba en una esquina. Su flujo mágico, aún incontrolable, se agitaba dentro de él como un torbellino. Sin darse cuenta, Luciano liberó una ráfaga de energía que hizo explotar todas las luces del lugar. Los cristales destellaron y se rompieron en mil pedazos, dejando al burdel en completa oscuridad.

El jefe del burdel, un hombre corpulento con una cicatriz en la mejilla, estaba furioso. "¡Eres un peligro!", gritó. "¡Tu magia descontrolada nos ha costado clientes y dinero!" Tomó a Luciano del brazo y lo arrastró hacia la puerta. "¡Fuera de aquí!"

Isabella lloró mientras veía a su hijo ser expulsado. "Luciano, mi pequeño mago", susurró. "Debo protegerte". Con lágrimas en los ojos, lo llevó tras el bar llamado "El Oso Grizzly", un lugar donde los mundos se entrelazaban y la magia fluía libremente.

Detrás del bar, Luciano encontró una puerta antigua. Al cruzarla, se encontró en un mundo completamente diferente. Las luces parpadeaban con colores imposibles, y las criaturas mágicas caminaban por las calles adoquinadas. Era el mundo mágico ruso, donde los hechizos y los encantamientos eran parte de la vida cotidiana.